Tengo cinco minutos para escribir esta newsletter.
Esta newsletter no se está escribiendo ahora.
Esta newsletter se escribió ayer en mi mente mientras paseaba.
Lo de antes pensado, dos veces repensado.
Son tiempos convulsos.
Petardos.
Agobio.
Valencia huele a churro.
Parece que todo está a punto de desbordarse.
Como los ríos de gente que corren y se agolpan alrededor de una mascletà.
Como los cristales de la casa de la iaia temblando durante el estallido sonoro.
Como yo misma, asustada por el ruido, cuando me escondía debajo de la cama y me tapaba los oídos.
Me gustaría huir pero no puedo.
Sandra, ¿dónde te irías?
A cualquier sitio si es contigo.
¡Riiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiing! (Sonido desagradable)
Ya se ha acabado el tiempo.
Pronto volverá el silencio.